7 pasos que debes seguir si quieres realizar exportaciones con éxito
miércoles, 7 de septiembre de 2022
Las 7 etapas de la exportación
¿Sabes cuáles son los pasos para exportar que debes seguir en tu negocio?
Sin duda, vender en el extranjero puede ser clave para que tu compañía dé un paso adelante en cuanto a crecimiento y expansión. A pesar de ello, nunca hay que empezar sin contar con el asesoramiento legal adecuado. Por ello, te describiremos el proceso para que lo comprendas y ejecutes con éxito.
¿Qué hacer para exportar?
El proceso de exportación requiere del cumplimiento minucioso de una serie de pautas. De lo contrario, el resultado terminará por no ser el esperado, con las consecuencias económicas que esto podría suponer. Con estos pasos, el riesgo lo reducirás en gran medida.
1. Desarrollo del plan comercial y creación de la empresa
El plan comercial y de marketing debe desarrollarse previamente a la creación de la empresa. A no ser, claro está, que ya poseas un negocio y que quieras reconvertir su actividad o ampliar sus horizontes.
En cualquier caso, es necesario que empieces evaluando el mercado en el que vas a competir, cuál será tu competencia y qué demanda tendrán los productos que quieres vender. Además, deberás determinar su valor añadido y crear una estrategia de comunicación. Redes sociales, posicionamiento en buscadores y, por supuesto, una buena página web son elementos imprescindibles.
Si no tienes ya constituida tu empresa, tendrás que elegir la forma jurídica que quieres que posea. En la mayoría de las situaciones, una sociedad limitada es la decisión más acertada.
2. Establecer los aranceles
Cada producto que quieras exportar tiene una clasificación arancelaria. Es decir, un código basado en el Convenio Internacional del Sistema Armonizado de Designación y Codificación de Mercancías de la WCO (World Customs Organization u Organización Mundial de Aduanas) o especificado por la Unión Europea a través del Arancel Aduanero Común.
Estos códigos establecen:
- Medidas de protección aplicables.
- Derechos e impuestos a las exportaciones.
- Formalidades.
- Estadísticas.
- Otros tipos de requisitos no arancelarios.
3. Registro tributario
Cada uno de los estados miembros de la Unión Europea asigna a sus operadores económicos un número con el que pueden exportar e importar. En el caso de España, es el EORI. Tiene el mismo formato que el NIF (Número de Identificación Fiscal) utilizado para el IVA (impuesto sobre el valor añadido), pero se le añade el prefijo ES y una letra de control. Este sería un buen ejemplo: ES-A-43546787.
Para poder obtener el número EORI, es necesario que lo solicites a la Agencia Tributaria. Cuando te lo proporcione, te inscribirá en el Registro de Identificación de Operadores Económicos y podrás empezar a exportar.
4. Elegir un Incoterm
Los Incoterms son acuerdos simplificados entre vendedores y compradores a nivel internacional, desarrollados por la ICC (International Chamber of Commerce o Cámara de Comercio Internacional). Establecen, entre otros, los siguientes aspectos:
- Quién paga el transporte.
- Quién se hace cargo de los gastos aduaneros.
- Dónde y cómo se efectuará la entrega de las mercancías.
En cuanto a los medios de pago, la mayoría de empresas apuestan por las facturas. Sin embargo, no es la única opción viable. Solo hace falta pensar, por ejemplo, en el crédito documentario. En cualquier caso, esta es una decisión que depende en exclusiva de la negociación entre las partes.
5. Buscar financiación
Llegado a este punto, requerirás la colaboración de una entidad financiera que te proporcione una línea de crédito. Lo más recomendable es que tenga presencia en otros países del mundo y, sobre todo, en aquellos que quieres operar.
6. Tramitar los documentos de exportación
Para que tu negocio pueda empezar a exportar necesitará, fundamentalmente, tres documentos. Hablamos, en concreto, de la packing list o lista de contenido, de la factura comercial y del certificado de origen. Sin ellos, será imposible que realices ninguna operación de exportación.
7. Organizar la logística
La última de las etapas de la exportación y, probablemente, la más importante. Por lo general, no tendrás los recursos suficientes como para gestionarla tú mismo. Por ello, es imprescindible que contrates los servicios de una empresa transitaria. Su función es organizar el conjunto de la cadena de exportación, desde que elegir un medio de transporte para llevar la mercancía hasta su destino hasta que la realización de los trámites aduaneros.
La figura de la empresa transitaria es muy útil. Esto se debe, sobre todo, a que se trata de entidades con un alto nivel de conocimiento del mercado internacional. Así que, en caso de que el país al que quieres exportar tenga alguna peculiaridad legal o documental, serás informado y asesorado de forma inmediata.
¿Alguna duda más respecto a exportar?
Ahora que ya conoces los pasos, tal vez albergues dudas al respecto y quieras tener el asesoramiento de un experto. En PROLUCO ponemos a tu disposición especialistas en derecho internacional de importaciones y exportaciones para que no tengas que preocuparte de nada. ¡Contáctanos!